Principios del desarrollo de aplicaciones móviles

Principios del desarrollo de aplicaciones móviles

Las personas pasan más tiempo en sus celulares que en cualquier otro tipo de dispositivo, es por eso que este es el gran momento de las aplicaciones móviles. La diferencia entre una buena aplicación y una mala suele ser la calidad de su experiencia de usuario (UX).

Los usuarios son cada vez más exigentes con las aplicaciones, quieren que el tiempo de carga sea rápido, de uso fácil, y experimentar placer durante la interacción. Aquí te mostraremos algunos de los principios del desarrollo de aplicaciones móviles. 

No es necesario empezar de cero, para comenzar inmediatamente lee Herramientas para desarrollar aplicaciones móviles.

Principios de desarrollo de aplicaciones móviles

Una buena app móvil combina estilo, función y facilidad de uso. Dicho esto, veamos algunos principios.

Nada es más importante que sus usuarios y sus objetivos

El propósito de una aplicación debe reflejarse en un nombre explícito, una descripción y una estética apropiada. Asimismo, el objetivo debe estar explícito a través de cada faceta del desarrollo de la aplicación móvil.

Lo más importante en el desarrollo de la aplicación viene a ser los objetivos que tengan los usuarios para usarla; a fin de que el usuario comprometido permanezca comprometido y no se vaya.

Por tanto, a medida que avances en el diseño, ve el diseño de la aplicación móvil desde la perspectiva del usuario, comprende sus necesidades y desarrolla la aplicación de acuerdo con lo que los usuarios quieren ver en ella.

La navegación de la aplicación debería ser fácil

Un principio fundamental para una aplicación móvil es que sea simple y conveniente, esto mejora la experiencia de usuario. Por lo tanto, deja que cada sección del desarrollo de tu aplicación móvil se desarrolle de forma natural y fluida; incorpora iconos, botones y otros elementos clave que se encuentren rápidamente, no los ocultes porque es muy frustrante.

Selecciona un modelo de navegación adecuado para integrar cada elemento de navegación en la pantalla disponible.

Botones y enlaces pensados para los dedos

Las pantallas de los móviles son pequeñas, sin embargo, los usuarios navegan utilizando los pulgares. Cuando se desarrolla un app móvil se debe pensar en la flexibilidad que deben tener los dedos sobre la pantalla y que los botones se ajusten al uso común para no presionar otra cosa cuando se intenta presionar una en específico. 

Compatibilidad en diferentes plataformas

Para aplicaciones Android e iOS, asegúrate de que el diseño sea flexible. Haz que sea compatible con varias plataformas, y en el caso de que sea difícil de hacer, invierte en diferentes versiones de la aplicación para diferentes plataformas, teniendo en cuenta a tu público objetivo y sus plataformas preferidas.

Prueba todo lo que construyes

Un principio para no ir a ciegas es probar cada parte de la aplicación. Utiliza pruebas de usabilidad, pruebas remotas y pruebas de usuario, a fin de asegurarte de proporcionar satisfacción a tus clientes.

Haz las pruebas en tantos dispositivos físicos como sea posible, asimismo puedes usar herramientas en línea para probar aplicaciones pensando en diferentes fábricas y dispositivos. Este último punto es fundamental pensando en Android, ya que los fabricantes a menudo personalizan el sistema operativo.

Ten en cuenta la escalabilidad

Recuerda que un dispositivo móvil no es solo un celular, así que tienes que pensar en la escalabilidad de los dispositivos, específicamente pensar en tabletas.

Una rápida investigación de usuarios puede revelar algunos estándares para los dispositivos y tamaños de pantalla. Si bien el teléfono y la tableta comparten muchas similitudes, los usuarios los usan de manera muy diferente.

Mejores prácticas

A continuación resumimos muchas recomendaciones prácticas que puedes aplicar a tu diseño.

Minimiza la carga cognitiva

La carga cognitiva se refiere aquí a la cantidad de energía cerebral necesaria para usar la aplicación.

El cerebro humano tiene una capacidad de procesamiento limitada, y cuando una aplicación proporciona demasiada información a la vez, el usuario se abruma y abandona la tarea.

Orden

Elimina el desorden, pues es uno de los peores enemigos de un buen diseño. Mientras más botones, íconos e imágenes tengas agregadas, la pantalla será más complicada.

El desorden es terrible en el escritorio, pero es mucho peor en los dispositivos móviles. Por tanto, elimina todo lo que no sea absolutamente necesario, opta por un minimalismo funcional, manteniendo el contenido y los elementos de la interfaz al mínimo. 

Divide tareas en trozos pequeños

Si una tarea contiene muchos pasos y acciones requeridas por parte del usuario, es mejor dividir dichas tareas en varias subtareas. Esta práctica ayuda a disminuir la complejidad para los usuarios.

Un buen ejemplo es un flujo de pago paso a paso en una aplicación de comercio electrónico, donde el diseñador divide una tarea de pago compleja en pequeños trozos, cada uno de los cuales requiere la acción del usuario. Es fragmentación puede conectar dos tareas diferentes como navegar y comprar; y si el flujo se presenta en pasos que el usuario debe seguir, todo el proceso se hace más comprensible. 

Utiliza las pantallas familiares

Por pantallas familiares nos referimos a pantallas que vemos en muchas aplicaciones, como "Comenzar", "Novedades" y "Resultados de búsqueda". Estas no requieren explicación adicional porque los usuarios ya están familiarizados con ellas.

Esto permite a los usuarios utilizar la experiencia previa para interactuar con la aplicación, sin curva de aprendizaje.

Minimizar el proceso de registro del usuario

El proceso de ingreso a través de formularios no debe ser complejos, porque muchas veces escribir desde una pantalla de un móvil no es tan cómodo. Los formularios deben ser cortos, con los campos absolutamente necesarios, solicitando mínima información de usuarios.

Asimismo, en cada campo puedes activar opciones para autocompletar la información, incorporando sugerencias tanto de datos geográficos como datos que el usuario ha proporcionado anteriormente. Finalmente, ayuda a que el usuario valide la veracidad de cada uno de los campos de inmediato, pues es frustrante si le haces volver cuando ya el proceso va muy adelantado para corregir un error.

Además de las prácticas ya mencionadas, debes procurar anticiparte a las necesidades de los usuarios, utilizar el peso visual para trasmitir importancia, evitar jergas y utilizar lenguaje más objetivo y asegurarte de que el diseño sea coherente en todos los sentidos.